El Coliseo es el anfiteatro más grandioso de Roma. Se construyo en 8 años (del 72 de Cristo al 80 d.C. Empezado
por Vespasiano y terminado por su hijo, Tito). El verdadero
nombre es Anfiteatro Flavio, pero adoptó el nombre de Coliseo, por la
proximidad del Coloso de Nerón. El Coliseo se ha convertido en el edificio
más representativo de la Ciudad eterna. El edificio tiene
forma elíptica y mide 188 metros de largo y 156 de ancho. El área
completa es de 3.357 metros cuadrados. La fachada mide 49 metros de
alto. Las 80 arcadas de la planta baja estaban numeradas progresivamente, con
excepción de las cuatro principales, reservadas al emperador, senadores y
autoridades públicas. Tiene cuatro pisos. Los tres primeros están formados por
80 arcos cada uno, enmarcados con pilastras, de distinto orden: dóricas en el
primero, jónicas en el segundo y corintias en el tercero. Están
coronados por un ático, que constituye el cuarto piso, con una decoración
de pilares cuadrangulares y un espacio (hoy vacío) que contenía los escudos
dorados. Todavía se puede apreciar loa huecos que utilizaban para colgar
las vigas de sostén del toldo, que protegía a los espectadores del sol. La
entrada era gratuita, pero la asignación de los puestos dependía de las
división social. Las primeras gradas del podio estaban destinadas al palco
del emperador, los magistrados y los senadores. En las graderías
bajas estaban destinadas a la orden de los caballeros. La gradería media
compuesta por 19 gradas y servida por 32 accesos, estaba reservada a la media
”burguesía”. La alta gradería, formada por 37 gradas, era para el resto el
pueblo. El aforo total del coliseo era de 73.000 espectadores. En el Anfiteatro
de Flavio se llevaba acabo enfrentamientos a pie (lucha contra fieras, lucha
de gladiadores y simulación de batallas históricas), también se
llevaban a cabo naumaquias (simulación de batallas navales, por lo
que para llevarlas a cabo se inundaba la plaza).
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